Iratxe García: La recuperación no va a llegar de un día para otro, pero esperamos que en 2021 la economía vuelva a crecer

Después de la crisis económica y social como consecuencia del Covid-19, ¿cuál considera usted que es el papel de la Unión Europea y el Parlamento Europeo para ayudar en una recuperación más pronta y efectiva?

La Unión Europea está jugando un papel fundamental en la recuperación económica.  Afortunadamente, ha aprendido la lección de la crisis de 2008, y ahora la UE ya no es sinónimo de austeridad y hombres de negro. Casi desde el primer momento se ha puesto manos a la obra para apoyar las medidas de urgencia que han ido adoptando los Estados, pero además ha tomado la decisión histórica de emitir deuda conjunta europea, que hará posible una aportación extraordinaria de fondos, el Plan Marshall que reclamó desde el principio el presidente Pedro Sánchez. Esta fue la decisión de los líderes europeos en la cumbre de julio. Ahora, el Parlamento Europeo tiene el cometido de determinar dónde y cómo se gastan esos fondos, fijar los criterios para una recuperación justa que nos permita avanzar en las transformaciones que tenemos pendientes, como la transición ecológica y la digital, que refuerce el pilar social y no genere nuevas desigualdades. Esa es la tarea que tenemos ahora mismo por delante y que esperamos culminar antes de final de año para que los fondos lleguen cuanto antes allí donde son más necesarios.

Los recursos para España enmarcados dentro del Fondo de Recuperación Europeo: tanto transferencias no reembolsables como préstamos. ¿Cree que han sido proporcionales y justos para España esos 140 mil millones teniendo en cuenta el impacto social económico en nuestro país?

España es uno de los grandes beneficiados del fondo de recuperación. Recibirá 140.000 millones de euros, de los cuales, más de la mitad serán transferencias a fondo perdido, y el resto préstamos. España es el segundo país que más fondos va a recibir, después de Italia.

Nuestro Gobierno ha conseguido una parte muy importante de nuestros objetivos y por tanto, sí, creo que podemos estar satisfechos, primero, de haber reclamado desde el principio una respuesta de la UE a la altura del reto que tenemos por delante; segundo, por la decisión, inédita hasta ahora, de emitir deuda europea; tercero, por conseguir que una parte importante del dinero sean transferencias directas; y cuarto, por la distribución de los fondos, en la que España es uno de los grandes beneficiados.

¿Cuál debería ser la prioridad para la inversión de esos recursos y de qué forma se podrían gestionar de mejor manera dentro de los planes de recuperación?

La posición común que hemos acordado en el Parlamento Europeo fija seis pilares sobre los que debe asentarse el plan de recuperación, y en el que los grandes grupos políticos estamos de acuerdo.  Por un lado, debemos aprovechar la enorme oportunidad que supone disponer de este dinero extraordinario para avanzar en las transformaciones que teníamos pendientes, como la transición ecológica y la digital.

Pero además tenemos que seguir trabajando en la cohesión social y territorial, para que nadie se quede atrás; atender a una política económica e industrial resiliente, que apoye a las pequeñas y medianas empresas; y mejorar la capacidad de las Administraciones Públicas, precisamente para que puedan sustentar y responder a este reto, ahora y en el futuro. Además, los socialistas hemos puesto especial empeño en que haya un pilar específico para las políticas de juventud, para ayudar en la formación y búsqueda de empleo, y evitar así que ésta sea la generación de la covid y tenga que cargar con el esfuerzo de la crisis y la recuperación futura.

¿En qué está enfocado actualmente el trabajo de los socialistas españoles y europeos en el Parlamento Europeo?

En lo referente al plan de recuperación, los socialistas españoles estamos en primera línea, no solo porque tenemos la presidencia del Grupo de los Socialistas y Demócratas en la Eurocámara. Algunos de nuestros compañeros y compañeras tienen responsabilidades que en este momento son clave para negociación de los fondos.

Eider Gardiazabal es ponente del Parlamento para el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, que desarrolla el grueso del fondo de recuperación (Next Generation EU), y por tanto, responsable de encontrar un consenso interno en la Eurocámara y posteriormente negociar con el Consejo. Ella, además, es la coordinadora de los socialistas europeos en la Comisión de Presupuestos, igual que Jonás Fernández lo es en la Comisión de Asuntos Económicos.

Esta es ahora mismo la gran prioridad, pero seguimos trabajando en otras cuestiones fundamentales, como la Ley del Clima, que se aprueba la próxima semana; el Pacto de Asilo y Migración que está ahora encima de la mesa; el acceso de las mujeres a los puestos de responsabilidad de las empresas; la reforma de la Política Agraria Común… por poner algunos ejemplos. Trabajo no falta.

 A su juicio, ¿Cuánto cree que podría tardar la recuperación económica en nuestro país?

Seamos realistas. Nos enfrentamos a una situación inédita en nuestra historia reciente, provocada por un virus contra el que todavía no tenemos tratamiento ni vacuna, y que ha tenido un impacto muy grave en la economía mundial, que está cada vez más interconectada.

La recuperación no va a llegar de un día para otro, pero esperamos que el próximo año la economía vuelva a crecer. Para eso es fundamental lo que hagamos durante estos meses. El Gobierno de España reaccionó rápido para dar apoyo a las empresas y a los trabajadores, con los ERTES, los créditos ICO, las ayudas a autónomos, para mantener a flote el mayor número de puestos de trabajo. Ahora es prioritario controlar la pandemia y que los fondos europeos lleguen cuanto antes.

¿Cómo se ve desde Bruselas la situación de España y el Gobierno del presidente y secretario general, Pedro Sánchez, tras del estado de alarma?

En la gestión de esta crisis, el presidente Pedro Sánchez ha ejercido un papel de liderazgo que es reconocido tanto en las instituciones europeas como en los Gobiernos de los países miembros. Fue él quien primero formuló la necesidad del gran plan de recuperación con fondos europeos que finalmente se ha aprobado, visitó uno por uno a los líderes europeos clave como Merkel y Macron, pero también a los más reticentes a la aprobación del fondo, y negoció de forma incansable hasta que salió adelante la propuesta. Sin duda, el papel de España en la escena europea ha salido reforzado.

Hablemos de transición ecológica y digital, si bien la pandemia ha podido afectar los planes y programas establecidos a nivel europeo, ¿se abren oportunidades para avanzar en estas transiciones tan importantes? ¿Cuáles serían las más importantes?

La pandemia no puede hacernos perder la perspectiva de las cuestiones que eran urgentes para nosotros hace tan solo unos meses, y que, por tanto, lo siguen siendo. El Pacto Verde Europeo y la transición digital están en el centro de nuestras prioridades. Lo que proponemos es precisamente convertir el problema en parte de la solución, es decir, aprovechar la oportunidad que disponer de fondos con los que no contábamos para avanzar en las transformaciones que tenemos pendientes y preparar a la Unión Europea para un futuro tecnológico y sostenible.

Otro sector muy importante para España del cual depende buena parte de su PIB es el turismo, dentro de la agenda europea, ¿En qué punto se encuentra este sector y qué importancia merece?

El turismo es uno de los grandes motores de la economía española y ha sido duramente castigado por la crisis de la covid, por tanto, es fundamental, no solo para los socialistas españoles sino también para la Comisión Europea, que lo reconoce como una de las áreas prioritarias para el plan de recuperación. El sector del turismo podrá beneficiarse de los diferentes programas de financiación europeos que se pongan en marcha, y sin duda, ocupará un lugar principal en el plan nacional que presente el Gobierno de España para acceder a los fondos.

En el Parlamento Europeo, los y las socialistas hemos impulsado además iniciativas para apoyar a este sector y restaurar cuanto antes la confianza de los viajeros, como un Fondo Europeo de Garantías de Viaje que asegure la estabilidad financiera a largo plazo, y garantice los derechos de los pasajeros; y un mecanismo comunitario de gestión de crisis, entre otros.

En algunos sectores de la derecha y la ultraderecha se ha puesto en duda el valor y la importancia de la Unión Europea. La lucha contra la Covid-19 ¿Tiene futuro? ¿se fortalece a la Unión? Y ¿en qué se debe continuar trabajando para su fortalecimiento?

La crisis de la covid 19 es la prueba más evidente de que necesitamos a la Unión Europea. Sin ella, la situación ahora sería extremadamente difícil. El afán de renacionalizar que vemos en la ultraderecha es solo la demostración de una estrechez de miras difícil de entender. El mercado único genera enormes beneficios a toda la Unión, pero sobre todo a los países mal llamados contribuyentes netos, como ha quedado demostrado en un reciente informe de la Comisión Europea. Pero no es solo una cuestión económica.

Nos enfrentamos a retos globales como el cambio climático, los flujos migratorios o la propia pandemia, frente a los que necesitamos unir fuerzas, y por tanto sí, tenemos que seguir fortaleciendo la Unión Europea, para conseguir una unión más estrecha y poner al día sus instituciones para que sean más democráticas y eficientes, y eso es lo que vamos a hacer en los próximos meses en la Conferencia sobre el Futuro de Europa.

Sobre la política de migración de la Unión, ¿en qué estado se encuentra el Pacto de Asilo y Migración? Y ¿Cuál es al aporte y la responsabilidad de España a este pacto?

La Comisión presentó la semana pasada un nuevo Pacto de Asilo y Migración, que era urgente y necesario, pero eso es solo un punto de partida que hay que concretar. La UE tiene que estar a la altura de sus valores. No podemos centrarnos solo en los retornos y el blindaje de fronteras. La solidaridad vinculante entre los Estados miembros, que ordena el Tratado de Lisboa, debe ser uno de los ejes fundamentales.

Los socialistas vamos a trabajar para garantizar que existan vías legales para las personas de terceros países que deseen vivir en la Unión Europea, que haya sistema de rescate y salvamento, una gestión de fronteras respetuosos con el Derecho humanitario y europeo, así como una atención a las demandas de asilo y protección humanitaria, asimismo apostamos por la cooperación de los países de origen y tránsito y por sistemas de integración eficaces.

Debemos cambiar la mirada negativa ante la inmigración, que no es un problema, sino por el contrario, una necesidad para nuestro continente.

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